Resumen del proceso de laminado en caliente del acero inoxidable
Descripción general
El proceso de laminado en caliente de El acero inoxidable se está laminando. Por encima de la temperatura de recristalización se realiza el laminado en caliente; por otro lado, el laminado en frío se lleva a cabo por debajo de dicha temperatura. En términos sencillos, el laminado en caliente es un proceso en el que los lingotes de acero se calientan y se laminan en varias etapas para luego ser convertidos en placas de acero. Este método puede reducir significativamente el consumo de energía y los costos. Esto se debe a que, durante el laminado en caliente, el metal presenta una alta plasticidad y una baja resistencia a la deformación, lo que permite disminuir considerablemente el gasto de energía necesario para su procesamiento. Laminado en caliente de acero inoxidable Puede mejorar las propiedades de procesamiento de los metales y aleaciones; es decir, los granos gruesos que se forman durante el proceso de fundición son rompidos, las grietas se reparan, los defectos de la fundición se reducen o eliminan, y la estructura resultante de la fundición se transforma en una estructura más adecuada para mejorar las propiedades de procesamiento del material.
Concepto y características del laminado en caliente
Concepto El concepto en cuestión se refiere a un principio fundamental que guía el diseño y la implementación de sistemas o productos dentro de la industria metalúrgica.
El laminado en caliente se refiere al proceso de laminación que se realiza por encima de la temperatura de recristalización del metal.
La recristalización significa que, cuando la temperatura de templado es lo suficientemente alta y el tiempo empleado es adecuado, se forman nuevos granos (núcleos de recristalización) en la estructura fibrosa del metal o aleación deformado; estos nuevos granos continúan creciendo hasta que la estructura original deformada desaparece por completo. Las propiedades del metal o aleación también experimentan cambios significativos durante este proceso. La temperatura a la que comienzan a formarse los nuevos granos se denomina temperatura de recristalización inicial, mientras que la temperatura en la que la microestructura queda completamente ocupada por nuevos granos se llama temperatura de recristalización final. Por lo general, la temperatura de recristalización es el promedio aritmético de la temperatura de recristalización inicial y la temperatura de recristalización final. Esta temperatura está influenciada principalmente por factores como la composición del aleación, el grado de deformación, el tamaño de los granos originales y la temperatura de templado.
Características {{feature1}} {{feature2}} {{feature3}}
鈶?Bajo consumo de energía, buena capacidad para el procesamiento de plásticos, baja resistencia a la deformación, poca endurecimiento por trabajo durante el proceso, facilidad para ser laminado, y reducción del consumo de energía necesario para deformar el metal.
Traducción del texto al español: 鈶?El laminado en caliente suele utilizar lingotes de gran tamaño y tasas elevadas de reducción de presión. La velocidad de producción es rápida y la cantidad obtenida es considerable, lo que abre el camino para una producción a gran escala. Nota: Se ha mantenido la estructura HTML original, así como las etiquetas, puntuación, variables (como {{ like_this }}), medidas y nombres de marcas. No se han traducido URLs, nombres de archivos ni clases CSS.
La estructura en su estado bruto (as-cast) es transformada en una estructura procesada mediante laminado en caliente, y dicha transformación mejora significativamente la plasticidad del material.
Las características del método de laminado determinan la anisotropía de la chapa obtenida. En primer lugar, existen diferencias significativas en las propiedades del material en las direcciones longitudinal, transversal y vertical. En segundo lugar, la presencia de texturas debidas a la deformación y a la recristalización hace que el rendimiento del laminado presente una marcada direcciónalidad.
Ventajas y desventajas del laminado en caliente
Ventajas Vida útil prolongada Mayor eficiencia energética Mantenimiento reducido
El laminado en caliente puede reducir significativamente el consumo de energía y los costos. El metal presenta una alta plasticidad y una baja resistencia a la deformación durante este proceso, lo que disminuye considerablemente el gasto energético necesario para deformar el material.
El laminado en caliente puede mejorar las propiedades de procesamiento de los metales y aleaciones. Es decir, los granos gruesos que se forman durante la fundición son rompidos, las grietas se reparan, los defectos de la fundición se reducen o eliminan, y la estructura resultante de la fundición se transforma en una estructura más adecuada para el procesamiento, lo que a su vez mejora las propiedades del material.
Traducción del texto al español: 鈶?El laminado en caliente suele utilizar lingotes de gran tamaño y reducciones significativas de su dimensión, lo que no solo mejora la eficiencia de producción, sino que también permite aumentar la velocidad de laminado y lograr un proceso continuo y automatizado. Nota: Se ha mantenido la estructura HTML original, así como las variables ({{ like_this }}), las medidas y los nombres de marca. Los URLs, nombres de archivos y clases CSS no se han traducido.
(2) Desventajas
鈶?Después del laminado en caliente, las inclusiones no metálicas presentes en el acero (principalmente sulfuros, óxidos y silicatos) se comprimen formando capas delgadas que se estratifican entre sí. Este fenómeno de delaminación deteriora significativamente las propiedades de resistencia a la tracción del acero a lo largo de su espesor y también aumenta el riesgo de rotura interlaminar durante el proceso de soldadura. La deformación local provocada por la contracción de la soldadura suele superar en varios órdenes la deformación necesaria para alcanzar el punto de fluencia del acero, que es mucho mayor que la deformación causada por las cargas normales.
鈶?Tensión residual causada por un enfriamiento desigual. La tensión residual es una tensión interna que se equilibra por sí misma, sin la necesidad de fuerzas externas. Acero laminado en caliente Los materiales de acero de diversos perfiles presentan este tipo de tensión residual. En general, cuanto mayor es el tamaño de su sección transversal, mayor es la tensión residual. Aunque la tensión residual se equilibra por sí misma, tiene cierto impacto en el rendimiento de los componentes de acero bajo la acción de fuerzas externas, como efectos negativos en la deformación, la estabilidad y el fenómeno del cansancio (fatiga).
鈶l laminado en caliente no permite controlar con gran precisión las propiedades mecánicas deseadas del producto. La estructura y las propiedades de los productos obtenidos por este proceso son difíciles de hacer uniformes. El índice de resistencia es más bajo que el de los productos templados en frío, pero más alto que el de los productos completamente recocidos. El índice de plasticidad es mayor que el de los productos templados en frío, aunque menor que el de los productos completamente recocidos.
Es difícil controlar el espesor de los productos laminados en caliente, y la precisión del control es baja; además, la rugosidad superficial (valor Ra) de los productos laminados en caliente suele ser de 0.5 a 1.5 μm mayor que la rugosidad superficial de los productos laminados en frío. Por lo tanto, los productos laminados en caliente se utilizan con frecuencia como… Laminado en frío Se necesitan más detalles para completar la traducción.
Aplicación de productos laminados en caliente
1) Acero estructural general, placas de acero laminadas en caliente para ingeniería y tiras de acero;
2) Tubos soldados, materiales laminados en frío, piezas para bicicletas, así como componentes importantes fabricados mediante soldadura, remachado y atornillado.
3) Productos laminados en frío y estirados a profundidad.
4) Piezas estampadas y piezas estructurales para automóviles, tractores, grúas de ingeniería y maquinaria industrial ligera de pequeño tamaño.
5) Contenedores y piezas estructurales de “bare metal”.
6) Oleoductos y gasoductos para el transporte de petróleo y gas natural.
7) Marcos y vigas.
8) Cinta de acero especial para ruedas de automóviles.
9) Patines industriales, escalones, peldaños de escaleras, etc.