Proceso de tratamiento térmico del acero inoxidable Cr18Ni8: Debido a su alto contenido de níquel y a su estructura austenítica en temperatura ambiente, presenta una alta resistencia a la corrosión en comparación con el acero inoxidable Cr13. Además, mantiene una buena resistencia a la corrosión tanto en temperaturas bajas como en temperaturas elevadas. Presenta una alta plasticidad y dureza, así como buenas propiedades de formado en frío y soldabilidad. No obstante, su resistencia mecánica en temperatura ambiente es baja, existe una mayor tendencia a la corrosión intergranular y a la corrosión por estrés, y su maquinabilidad es deficiente.
La austenita no se transforma al calentarse, por lo que no puede fortalecerse mediante tratamientos térmicos. Los tratamientos térmicos únicamente pueden utilizarse para mejorar la resistencia a la corrosión del acero.
Tratamiento de solución: El objetivo es disolver completamente el carbonuro y retenerlo en la austenita a temperatura ambiente, para obtener una estructura de austenita monofásica que proporcione al acero la mayor resistencia a la corrosión.
La temperatura de calentamiento durante el tratamiento por solución es generalmente alta, entre 1050 y 1100 °C, y se ajusta adecuadamente en función del nivel de contenido de carbono. Debido a la baja conductividad térmica del acero inoxidable 18-8, no solo es necesario realizar el enfriamiento (temperado) después del calentamiento previo, sino que también el tiempo de retención durante el tratamiento por solución debe ser prolongado. Durante este proceso, se debe prestar especial atención a evitar un aumento en el contenido de carbono, ya que esto aumentaría la tendencia a la corrosión intergranular del acero 18-8. El medio de enfriamiento utilizado suele ser agua limpia. La estructura resultante después del tratamiento por solución es generalmente austenita monofásica; no obstante, los aceros inoxidables que contienen titanio, niobio y molibdeno pueden también contener una pequeña cantidad de ferrita, especialmente cuando se han fundido. La dureza del material después del tratamiento por solución es, en promedio, de alrededor de 135 HBS.